Crisis lenta y dolorosa de EDT

Glénat es una editorial francesa que cuenta con una filial en España. Creada esa filial en 1990, fue comprada por Joan Navarro y Félix Sabaté en 2011, rebautizándola en la primavera de 2012 como EDT, Editores de Tebeos. Funcionando de manera independiente de Glénat pero sin desgajarse totalmente. Sin embargo, a partir de ese momento es cuando han llegado los problemas. El primero de ellos tuvo lugar en septiembre de 2012 cuando pierden todas las licencias de la editorial Shueisha al no renovársele el contrato. Ello implicó que perdieran los derechos de edición de obras maestras como Naruto, Bleach o Saint Seiya, al margen de otras muchísimas más de público más reducido. ¿Cuál pudo ser el motivo? No sabemos si estuvo relacionado con impagos, pero el caso el que la rescisión del contrato fue adoptada de forma unilateral por la editorial japonesa.

Sin embargo, lo peor estaría por llegar. A partir del segundo semestre de 2013, los lanzamientos de EDT han brillado por su ausencia. El 28 de junio salió a la venta el tomo 9 del integral de Ranma 1/2 y desde entonces nunca ha visto la luz el 10. Primero aseguraban que saldría a finales de año, luego en enero, luego el primer trimestre de 2014... ¿a qué estaba jugando EDT? ¿al ratón y al gato? Nadie daba la cara hasta el momento. En otoño lanzaron una ronda de saldos de Manga descatalogado y finalizó en enero. Pero mientras tanto continuaban las promesas de que seguirían publicando y respetando la periodicidad bimensual. Pero las respuestas cada vez se reducían más, tanto en Facebook como en Twitter. 

Total, que en esta semana y con motivo del XIX Salón del Cómic de Granada, se anunció por fin una rueda de prensa de Joan Navarro para hablar sobre el futuro de EDT. Ayer sábado, por la mañana, tuvo lugar y las declaraciones no han podido ser más descorazonadoras: en resumen, EDT abandonará el Manga progresivamente, se centrará en el alternativo y también en cómic español menos conocido. Lo más importante es que Navarro se dará un plazo de 6 meses para intentar salvar la empresa antes de optar por su liquidación. Por lo tanto, significa que nos quedamos colgados con Ranma, Berserk (que ha cambiado de editorial 3 veces) y La espada del inmortal que tan sólo faltaba el último volumen. ¿Qué va a pasar con estas colecciones? Porque si bien el futuro de la editorial era un misterio sin aclarar pero sí por imaginar, el de las colecciones es aún más incierto. Ni se sabe si seguirán estando ahí colgadas sine die o si pedirán la rescisión del contrato para que otra editorial (por ejemplo, Planeta) se encargue de proseguirlas.

Es una triste noticia que una editorial esté al borde de la quiebra y nos consta que sus propietarios lo tienen que estar pasando mal. Pero creo que esto se podría haber gestionado mejor y no dejar pasar tanto tiempo. Sólo esperar que con el manga alternativo sean capaces de subsistir (cosa que, para que nos vamos a engañar es muy complicado) y de la misma forma faciliten que las colecciones pendientes sean continuadas por otras editoriales a la mayor brevedad. Siento mi tono crítico, pero la eterna espera y falta de respuestas convincentes referidas a Ranma me ha decepcionado mucho.

Fuente de la fotografía: blog de Joan Navarro.