En el día de hoy voy a recordar algunos juegos de la consola Nintendo 64, que en los momentos previos a su lanzamiento se denominó Ultra-64. Sustituyo a Super Nintendo y vio la luz en 1996, el mismo año que PlayStation de Sony, y terminó su comercialización en 2002 siendo sustituida por Gamecube. Su mayor ventaja era sin duda que explotó la perspectiva 3D, adaptando muchos de los juegos existentes en consolas de generaciones anteriores de la compañía. En la actualidad podemos seguir disfrutando (o conocer por primera vez) estos grandes juegos gracias a los emuladores, como el Project 64. Pero el juego más famoso fue sin duda Super Mario 64, que aportó interesantes novedades a los títulos del fontanero más popular.
Super Mario 64 se basa en la exploración de un castillo a lo largo de sus niveles (planta baja, primera planta, segunda planta, sótano, exteriores...). En cada piso existen habitaciones y unos cuadros a través de los cuales podemos acceder a las fases. El objetivo es que en cada una de esas rondas obtengamos una serie de estrellas que nos permitirán abrir más puertas y desbloquear más fases. Algunas de esas estrellas son muy fáciles de ver, pero existen otras que se hallan escondidas y suponen un reto para el jugador. Eso sí, al principio de cada fase podemos leer una frase que nos da una pista sobre dónde puede estar o cómo podríamos obtenerla. Son hasta 15 fases que nos proporcionarán muchas horas de entretenimiento mientras intentamos encontrar todas las estrellas de cada una. Si conseguimos la gesta de conseguirlas todas las que hay en el juego, podremos ver a Yoshi en los exteriores del castillo. Finalmente, indicar que entre piso y piso asistiremos a diversos enfrentamientos contra Bowser.
Entre otros juegos de la consola, hay que destacar muchos que consisten en acción en primera persona. Al estilo de muchos que han triunfado en los ordenadores. Me refiero por ejemplo a Goldeneye 007 o World is not enough, que se insertan dentro del subgénero de ir cumpliendo misiones y a su vez de trazar una estrategia eliminado a los enemigos. Otros más sangrientos u oscuros son Castlevania, Turok, Resident Evil o incluso Quake o Duke Nukem, que saltan del PC a la consola de forma muy brillante. Con una dinámica 3D y la posibilidad de explorar diferentes caminos, supone sin duda un gran avance que la nostálgica Super Nintendo no podía favorecer. Por último, también se incluye alguna joya clásica como Megaman, aunque personalmente a mí no me termina de convencer.
También tenemos otros de lucha como Mortal Kombat 4 ó Killer Instinct 2 con nuevos combos, ataques especiales y remates finales que nos dejan sin aliento. Pero hay espacio para los de combate con una dinámica más infantil, como Smash Brothers. Podemos elegir de combatientes a diferentes mascotas de la consola, como Kirby, Mario, Link (Legend of Zelda) Donkey Kong o Toad. Nuevamente se escapan de la perspectiva de 2 dimensiones con escenarios que nos recuerdan a pasajes de estos videojuegos tan populares de Nintendo. Además, podemos llegar a jugar varios a la vez. Años más tarde sería mejorado en la actual consola Wii, la última generación.
Respecto a los deportivos, se experimenta un gran avance con las adaptaciones de International Superstar Soccer y World Cup 98. Las opciones de juego y las selecciones mundiales se incrementaron considerablemente y no sólo los aspectos técnicos. Pero no menos adicción favorecería el Super Mario Kart 64, con una acertada adaptación. Personalmente prefiero más este tipo de juegos por la mayor dificultad que implican los de balompié. Aunque por aquél entonces estos no tenían nada que envidiar a los que se vendían en formato de DVD para ordenador.
Por último están los de estrategia como Starcraft y Command & Conquer, otros dos títulos que nacieron en PC y aquí son remasterizados. Pero llama la atención Bomberman. Un auténtico buque insignia de Nintendo con el permiso de Mario. Todas las videoconsolas de la compañía tienen su versión de este juego. Pero tiene una adaptación que se transforma en un plataformas, con una perspectiva muy buena.
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