martes, 21 de abril de 2015

Logro desbloqueado: Salón del Cómic de Barcelona 2015

Pues sí. Llega un momento, un día en que por fin se cumplen ilusiones enormes. Este pasado fin de semana tuvo lugar el 33 Salón Internacional del Cómic de Barcelona y... allí he estado y con mi mujer. Nos hemos vuelto con un buen botín de firmas y dibujos dedicados y la experiencia de conocer una feria muy atractiva. No creo que vuelva pronto por allí, más que nada porque la próxima vez que vayamos a Barcelona será en todo caso para conocer y visitar la ciudad. Pero pienso que se ha aprovechado al máximo el viaje en lo que estrictamente se refiere al Salón, que era el motivo principal del desplazamiento. Contaré en pequeñas pinceladas, lo que dio de sí nuestra visita. La mejor forma de celebrar mi primer cumpleaños de casado, que oficialmente tuvo lugar ayer.

Como muchos saben, no existe aún trazado del Ave para Murcia. Sólo llega a Alicante y Albacete. Pues 8 horitas que nos hemos tragado tanto en la ida como en la vuelta en el Talgo. Llegamos el viernes a eso de las 2 de la tarde y aprovechamos para comer con unos familiares de mi mujer y dar un pequeño paseo por la ciudad. Pudimos ver la Sagrada Familia, el edificio artístico probablemente más emblemático de la ciudad. Un bonito espectáculo de luz y color en su interior, al margen de su gigantesco tamaño. También vimos el exterior de la Casa Batllò. No entramos porque el ticket costaba nada menos que 21,50 euros por persona. Ya de por sí era caro pagar 15 euros por entrar a la Sagrada Familia, pero el coste de la segunda era demasiado exagerado. Por lo demás, visitamos el centro comercial de las Arenas y llegamos hasta la azotea, contemplando una bonita panorámica de la ciudad en la que se podía ver la Plaza de España y la Fira. Estos días nos hospedamos en Hostal Baler, una pensión de dos estrellas modesta pero recomendable para los interesados en el Salón: a 5 minutos de la Estación de Sants y a otros 5 de la Fira. Sólo hubo dos cosas que no me gustaron, pero sólo relacionadas con el cuarto de baño: no tenían champú (sólo gel) y el ruido que hacía el aseo al ser utilizado por el "vecino" de al lado.

El sábado fue el día grande. Llegamos a eso de las 9:20 para hacer cola de entrada. Y ya había muchísimas personas, teniendo que dar la vuelta a medio recinto para llegar al final. Mucha gente joven, que podríamos englobar entre los 16 y 22 años e igualmente no pocos de ellos disfrazados. Y no eran los típicos trajes del Megumi o similares, no. Muy currados. Ví de todo, desde algunos indescriptibles hasta otros relacionados con el Manga como Naruto, Goku o Arale. Juventud, divino tesoro. Pero me hicieron pensar y recordar que la edad va subiendo y entre otros para mí también. Igualmente pude ver a cosplayers algo más maduros de series de televisión como Jon Nieve y Petyr Baelish (clavados ambos), cine como Iron Man y varios de Star Wars, etc. Incluso ví a alguien con la careta de Caballo Loco de Forocoches. Tremendo. Pero para entrar, afortunadamente, los controladores de accesos fueron muy eficientes y rápidos. Un 10 en ese aspecto.


El Palau 2 de la Fira albergaba hasta tres pabellones con stands de muchas editoriales. Pero además se podía acceder a la planta de arriba en la que se podían ver exposiciones de cine y videojuegos. Pero eso ya lo veríamos el domingo. El sábado nos pusimos desde las 11 de la mañana en la cola de JAN y Efepé y pese a no haber demasiada gente delante de nosotros nos tuvimos que esperar hasta las 13 y pico para ello. Todo un cachondo Francisco Pérez Navarro, que no dibujaba pero sí firmaba (como guionista del Supergrupo). Le pedí a Jordi Coll, de Amaníaco y que escribía en un papel los nombres o peticiones especiales de los fans, que apuntara una felicitación de cumpleaños. Así fue y JAN desde luego que se lo curró. Para mi mujer vino dedicado el Pulgarcito nº 4. También me pude hacer una fotografía con ellos. Por otra parte, con motivo de esta firma conocí a Kaximpo, Omen y Miski del foro de la TIA y con ellos pude conversar un poco de mis impresiones sobre esta visita, aunque más con Miski con quien hice cola aquí y con Ibáñez.


Una vez con las firmas, nos fuimos a hacer cola en un burger de al lado. Bueno, realmente hicimos DOS colas. Una para pedir y otra para recoger. Bueno, mi coca cola estaba hecha un iceberg y explotó literalmente, mojando la mesa y sin que pudiera beber casi nada. Pero el caso es que comí en apenas diez minutos y enseguida me levanté para hacer cola de Ibáñez, mientras mi esposa terminaba de comer tranquilamente. Y ya había cinco personas a las 14:15 siendo a las 5 de la tarde el inicio. Se hizo larga la espera, pero ahí llegó el gran Francisco Ibáñez recibido entre aplausos. Igualmente me hizo un dibujo felicitación de cumpleaños, refiriéndose a mi edad como "¡quién los pillara!". Pero se portó mejor aún haciéndonos cuatro dibujos, los tres últimos para mi mujer, mi hermano y un amigo. Y sólo se podía uno por persona, llevándonos una enorme bronca por parte de Manuel de Cos: "qué falta de educación, por favor". A lo que Ibáñez zanjó terminando de firmar y dibujar el Olé de la Sirenita para mi mujer con un "¡ya está, ya está!". Para educación la de De Cos, que no sabe que lo que él cobra lo gana de lo que pagamos nosotros. El caso es que había cumplido un sueño: compartir unos segundos con Ibáñez y tener una fotografía. El más grande de la historia del cómic español y uno de los grandes a nivel mundial.

Terminado lo más duro, descansamos un ratillo y después nos dirigimos al stand de Astiberri para que mi paisano Pedro Vera me firmara el Ranciofacts, primer volumen. Una recopilación muy divertida, que ya leí posteriormente a mi enlace matrimonial y volví a hacerlo en el viaje de vuelta con lágrimas de la risa. Muy majo Pedro, que además me comentó al verme "tu cara me suena". Y es que aparte de nacer en el mismo pueblo vivimos en la misma localidad. Ante todo, me alegra saber que habrá más volúmenes de estos chistes satíricos sobre actitudes y frases típicas de muchos temas. Por supuesto, también cayó una foto. Para terminar el sábado me acerqué al stand de la Asociación de Autores de Cómic de España y allí me firmó UPL (foro de la TIA) un ejemplar de una pequeña historieta de JAN que él mismo ha coloreado: Aventuras y desventuras de una mosca en Sabadell.


El domingo, como ya he señalado más arriba, lo dedicamos en primer lugar a ver la exposición de cine fantástico y videojuegos. Entre otras cosas vimos la cabina telefónica del Dr. Who, el trono de Canción de Hielo y Fuego, figuras grandes de personajes como Link de Legend of Zelda, figuritas de Star Wars... y, por supuesto, páginas originales de cómic relacionados con el cine fantástico. Posteriormente nos bajamos a ver a Cera y Ramis para que nos hicieran sus dedicatorias. Fuimos los primeros de la fila y no existía nada de cola. A Cera le comenté que esperaba una segunda oportunidad para Pafman: "somos pocos, pero muy fieles". Él, notándosele triste y bastante escéptico me contestó: "ojalá sea posible, por vosotros". También me confesó que casi no se acordaba de dibujar a Pafman. A buen seguro el anterior fue en el Salón de 2014. Ramis nos dedicó unos Xunguis, que es el trabajo al que se dedican y les va muy bien. Pero ellos pueden hacer más, sólo que la Editorial no sabe valorar todo su potencial. Finalmente, una fotito para inmortalizar el recuerdo. Antes de irnos a casa (y tragarnos otras 8 horas de tren), todavía nos dio tiempo a asistir a un pequeño encuentro con los creadores de Hora de aventuras y a conocer a otro forero de la TIA, Bequick, y agradecerle el detalle que tuvo en su día de enviarme un cómic firmado por Ibáñez (del que realmente no es fan).

En definitiva, un fin de semana muy aprovechado dentro de lo corto que ha sido. Pero inolvidable. Soñé que algún día podría contar todo esto y ese momento ha llegado. 

1 comentario:

Hergest dijo...

Me alegro que finalmente hayas podido conocer a Ibáñez, después del disgusto de la cancelación en Murcia te lo merecías. ¡Felicidades!