domingo, 7 de abril de 2013

La elegancia del pavo real


El post de hoy, sobre animales, se lo voy a dedicar a una especie que quizás hasta ahora nunca me había llamado la atención, pero que desde que en mi centro de trabajo se ha dado la circunstancia de que en ocasiones se cuelan en nuestro parking varios ejemplares (existe una granja al lado), me ha dado curiosidad por buscar información. El pavo real pertenece a la familia de fasiánidos y es originario del sur asiático, aunque se dice que fue introducido por Alejandro Magno en la antigua Grecia como especie ornamental. Generalmente de la India y de Sri Lanka, aunque existe una subespecie en Java y Birmania de color verde y otra en el Congo. Actualmente no son especies destinadas al alimento humano, pero en la época del Imperio Romano sí que eran digeridos. Su longevidad puede acercarse a los 20 años. Lo más gracioso es el sonido que emiten, que mientras que en los pavos comunes es el conocido “glogloglo” en este caso es una especie de “kii-oo”.

En el pavo común real existen sustanciales diferencias entre machos y hembras: ellos son de plumaje azul intenso y ostentan una larga cola (puede superar el metro y medio) que se abre formando un elegante e impresionante abanico, mientras ellas son de color pardo grisáceo. Los machos son polígamos y utilizan su cola en abanico para cortejar a las hembras. De hecho, su tamaño, color y calidad son sus puntos fuertes para tener éxito en sus conquistas. Las hembras escarban en la tierra y pueden llegar a depositar entre 3 y 6 huevos. 

Alojamiento.- Debe ser en libertad, no pueden vivir como los pavos normales en una cuadra. Necesitaría jardines amplios o fincas, a ser posible que tengan árboles a los que se puedan subir e incluso alimentarse. La extensión mínima se puede situar en 50 metros cuadrados y el suelo del jardín o finca debe ser arenoso o de césped, para que pueda buscar alimentos como insectos. No obstante, en época de frío o con climas húmedos, necesitarán algún espacio en el que guarecerse especialmente de la lluvia. También es adecuado que puedan resguardarse a la sombra en época de calor. A los pollitos se les puede introducir en un cajón seco y a no más de 20º de temperatura, pero será necesario dejar que puedan correr al menos quince minutos en el jardín para que puedan divertirse y estén en buena forma. 


Alimentación.- En cuanto a los pollitos, se les debe proveer de maíz y gusanos, que pueden obtenerse en tiendas de venta de artículos de pesca. La comida se colocará en un cuenco y poner a su disposición un bebedero. Los adultos son omnívoros y pueden alimentarse de maíz, trigo, cebada, avena descortezada, cañamón, arroz, gusanos, bayas, verduras frescas como lechuga o escarola y pienso industrial para perros o gatos. Se pueden colocar comederos semicubiertos un par de veces al día. Y, por supuesto, agua limpia y fresca. 

Domesticación.- El pavo tiene que tener contacto con humanos para que pierda el miedo. Es más fácil cuando se le empieza a cuidar y domesticar desde pollito. Para ello hay que acariciarlo y que se acostumbre a vernos. Sin embargo, cuando sienten la presencia de alguien que no conocen, detectan enseguida la sensación de peligro (se creen que le van a quitar las plumas) y huyen siendo prácticamente imposible alcanzarles, volando hacia los árboles. Son unos animales con fuerte sentido territorial y hay que tener cuidado de no juntar a demasiados machos, pues pueden llegar a tener peleas. 

Enfermedades.- Son especies muy sensibles al inverno, las bajas temperaturas y las humedades pues pueden contraer enfermedades respiratorias, afecciones intestinales e incluso tuberculosis. En general pueden verse afectados por las enfermedades propias de las aves y hay que tener cuidado porque incluso nos puede contagiar a nosotros. 

La coriza es una infección muy contagiosa que provoca conjuntivitis, descarga nasal y disminución de la producción de huevos. Los programas de vacunación no llegan a evitar que puedan infectarse, pero sí que reducen la probabilidad de que la bacteria les infecte. Una solución a posteriori es suministrarles antibióticos, como el Rhodogil que son unos comprimidos que se recomiendan en algunos foros. 

La histomoniasis es una enfermedad parasitaria del ciego e hígado de muchas aves que se transmite por ingestión de heces contaminadas, huevos y larvas de parásitos y por ingestión de lombrices de tierra contaminada. Puede provocar hemorragias por úlcera, hepatitis necrótica, inflamaciones, anorexia e incluso heces amarillas. No hay medicamentos propios y produce una elevada mortalidad así que para prevenirla es imprescindible limpiarse bien el jardín de excrementos, pues las heces contienen parásitos y microorganismos que pueden generar enfermedades. De cualquier manera, como medida de prevención se deberían someter los pavos a una desparasitación una vez por cada trimestre.

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