lunes, 26 de marzo de 2012

Elecciones Andaluzas y Asturianas 2012


Ayer tuvieron lugar las elecciones a las asambleas legislativas de la Comunidad Autónoma de Andalucía y al Principado de Asturias. Sin embargo, dichos comicios se convocaron por motivos muy diferentes. En el caso andaluz, donde el PSOE gobierna desde los años setenta, esta Región cuenta con un calendario propio, en virtud de su condición de comunidad que accedió a la autonomía por la vía del artículo 151 permitiendo una consolidación más rápida de dicho proceso, pese a que exigiese una aceptación más reforzada. En el supuesto asturiano, han tenido que repetirse las elecciones 10 meses después al no alcanzarse una adecuada gobernabilidad, pues la inestabilidad derivada de un gobierno minoritario de Foro Asturias y un mapa parlamentario complicado ha impedido cerrar acuerdos importantes como los presupuestos generales. Sin embargo, una cuestión se planteaba sobre la mesa de ambos comicios: la reacción a los recortes y reformas laborales del Presidente Rajoy.

El gobierno de José Antonio Griñán, en Andalucía, no quiso coincidir la fecha de las elecciones con las Generales, que se adelantaron al 20-N, con el objetivo de contrarrestar el decremento de popularidad del partido socialista así como los escándalos de corrupción de los ERE que los medios de comunicación afines a su partido han querido tapar. Pero de todos modos, el escenario ya estaba tiznado de cifras muy negativas en términos de desempleo, inflación y sueldos. Un ambiente muy propicio para que existieran cambios, para que nuevos partidos accediesen a la asamblea e incluso favoreciesen un cambio de gobierno o la necesidad de fraguar pactos no ya de estabilidad, sino de coherencia y de apoyo a una mejor democracia y lucha contra los corruptos. En 2008 el PSOE alcanzó la mayoría exacta con 56 escaños mientras que el PP obtuvo 47 e IU 6, mientras que el PA (Partido Andalucista) desaparecía siendo fagocitada su presencia por los populares. El PA y UPyD aspiraban a entrar en el arco parlamentario andaluz y este contexto verdaderamente lo hacía intuir más que probable, al menos en el caso de UPyD.

Desgraciadamente Martín de la Herrán no ha podido entrar pese a conseguir más de 128.000 votos. El PP de Arenas ha obtenido 50 escaños, pero el PSOE de Griñán ha venido a ganar las elecciones con 47 escaños y un 39,5% de los votos, que de la manera más evidente se suman a los 12 obtenidos por Izquierda Unida, en un brillante ascenso que ha culminado en una duplicación de sus escaños. Así pues, ha pesado más la ideología de izquierdas a la hora de retirar el voto a los socialistas, de manera que el aumento del PP ha sido más bien exiguo y sinceramente considero una absurdez el que se celebre por los populares su primera “victoria” en las elecciones andaluzas cuando saben perfectamente que ha sido el enésimo fracaso de Arenas. Esta vez más sonado. Ni los escándalos de malversación de fondos de los socialistas andaluces ni los chorizos que han perpetuado estos han sido aprovechados. Y una vez más la ley electoral ha premiado a los grandes partidos con escaños más “baratos”, es decir, con menos votos, y ha castigado a UPyD dejándola fuera de la asamblea. El PA queda otros cuatro años fuera del arco.



En Asturias se ha repetido el mismo problema de 2011. La formación de Francisco Álvarez Cascos, Foro Asturias, partía con el objetivo de defender su pírrica victoria en las elecciones de mayo de 2011. Ha pasado de 16 escaños a 13, mientras que el PP de Mercedes Fernández se mantiene en 10 evidenciando otro fracaso del partido del Presidente Rajoy. El PSOE de Javier Fernández se ha alzado como ganador de las elecciones tanto en votos como en escaños (16), mientras que IU (Jesús Iglesias) aumenta en uno consiguiendo 5 escaños. UPyD consigue entrar gracias a la gran campaña de Ignacio Prendes con un 3,7% de los votos. La mayoría está establecida en 23 escaños, por lo que la izquierda suma 21 y la derecha 23. Estos son los resultados.

La última oportunidad del PSOE de Asturias para poder formar gobierno sería que el voto de los asturianos emigrantes fuera lo suficientemente mayoritario para otorgarle el escaño número 17. De esta forma podría negociar con IU y con UPyD. Un pacto FAC-PP puede ser bastante tirante, teniendo en cuenta la evidente rivalidad entre el PP de Asturias y la formación de Cascos, ex líder y ministro popular que abandonó el partido conservador por discrepancias. Los resultados, dejan de esta manera otro puzzle, como si conformaran un cubo de Rubik y le diéramos otra vuelta de tuerca. Total, que en ocho meses lo mismo tenemos otra vez elecciones.

Si hay un gran derrotado, ese ha sido el PP de una manera rotunda. Ni la mala gestión y peor seguridad de Foro Asturias ni la corrupción escandalosa de Manuel Chávez y Griñán han sido aprovechadas por los populares para acaparar dos comunidades más, lo que hubiera terminado de tintar de azul prácticamente todo el mapa de la geografía española salvo las regiones nacionalistas. El ganador moral ha sido Izquierda Unida que ha arrebatado muchos votos al PSOE, pero a su vez esto ha sido precisamente una victoria de los socialistas, que prosiguen cuatro años más en Andalucía al más puro estilo del PRI mexicano del siglo XX y aunque no van a recuperar Asturias, sí que han logrado retornar al primer puesto. Lo de Arenas no es en absoluto un triunfo, sino un ridículo.




Eso sí, en relación con los pactos de gobierno, hay que saber diferenciar a Izquierda Unida de UPyD. Los primeros ya han manifestado en Andalucía su intención de apoyar al PSOE en forma de carta blanca, sin condiciones ni más argumentos que el sí porque sí. Sólo UPyD establecería unas reglas lógicas para dar su voto, en una línea de coherencia y de compromiso democrático que implicaría aspectos como la reforma de la Ley electoral y la lucha contra la corrupción. En definitiva, el progreso de la democracia. No el conservadurismo y retroceso que los partidos gobernantes han mantenido y sectores de la oposición consentido.

Con todo esto, me quedo con la nota más positiva que implica el crecimiento de UPyD con la entrada en el parlamento asturiano. Primero fue en el Parlamento Europeo con Sosa Wagner, luego en el Congreso con Rosa Díez, después en Euskadi con Gorka Maneiro y tras conseguir concejales en casi toda España, entró con fuerza en la Asamblea de Madrid con 8 diputados y ha incrementado su presencia el Congreso con 5 y grupo parlamentario. Un aumento firme y seguro, que poco a poco está calando en la sociedad. El próximo capítulo será en Europa, donde España tiene mucho que decir después de haber reflexionado sobre su situación a nivel nacional y territorial en un contexto de fuerte crisis. Pero dejémonos durante un año de elecciones, que sin duda han mellado en un menor descenso en la participación electoral. Es hora de seguir juzgando la actuación de los políticos que, para bien o para mal, influirá seguro en la resolución o agravamiento del panorama actual.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Excelente sinopsis de lo acontencido.

Raw dijo...

Última hora: finalmente el voto emigrante asturiano arrebata a Foro un escaño que pasa a manos del PSOE. Así, existiendo empate a 22 en los bloques de la izquierda y de la derecha, UPyD será clave para la formación del gobierno del Principado.

Eso sí, no hay que descartar la posibilidad de que se abstenga, en cuyo caso gobernará automáticamente la lista más vota que es la del PSOE. De hecho, UPyD sólo dará su voto a quien cumpla con requisitos básicos como modificar la Ley electoral.

De otro lado, debo y comentar que IU ha puesto como condición al PSOE andaluz que se investigue la corrupción de los ERE. ¿Le harán realmente caso? No sé yo...